ODS 1: Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.
Disfrutar de acceso a agua potable y saneamiento está estrechamente relacionado con una disminución en los niveles de pobreza. En primer lugar, la necesidad de acarrear agua hasta los hogares conlleva un importante gasto de tiempo que podría ser utilizado en otras labores más productivas. En segundo lugar, allí donde no se dispone de agua potable, es necesario adquirirla, generalmente a través de camiones de distribución, que suelen ser más caros y no siempre de la calidad adecuada. El Fondo del Agua trabaja para dotar de agua y saneamiento a las poblaciones más desfavorecidas, enfocando sus programas a las áreas rurales o periurbanas, donde las necesidades suelen ser mayores.
ODS 3: Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todas las personas a todas las edades.
Las actuaciones del Fondo del Agua contribuyen directamente a mejorar la salud de las personas, previniendo enfermedades intestinales o diarreicas como el cólera, y reduciendo la posible transmisión de virus, para las que la higiene es imprescindible, como se ha visto con el coronavirus. Los programas suelen ir acompañados de campañas de sensibilización sobre higiene y buen uso del recurso.
ODS 4: Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todas las personas.
Para que la educación sea equitativa, los niños y niñas tienen que disponer de tiempo suficiente para asistir a las clases y dedicar horas al estudio. Disponer de agua corriente en los hogares facilita la asistencia a la escuela, al no tener que dedicar tiempo a la búsqueda de agua para ayudar a sus familias; previene enfermedades que impiden asistir al colegio y mejora y facilita la higiene personal del alumnado. Para las niñas y adolescentes, además, es esencial disponer de un espacio privado en los colegios para la higiene menstrual. Esta sencilla acción ayuda a evitar el abandono prematuro de las adolescentes.
ODS 5: Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las niñas
Avanzar en el Objetivo número 5 es una de las prioridades de la política de cooperación española y uno de los ejes transversales del trabajo del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento. El acceso a agua y saneamiento de forma segura facilita la vida de las mujeres, principales encargadas de la provisión de agua y alimentos en las familias. Pero, además, todos nuestros proyectos llevan incorporado un enfoque de género para acompañar el empoderamiento de las mujeres, impulsar su presencia en puestos de responsabilidad de las Juntas de Agua y su participación efectiva en la toma de decisiones.
En este sentido, se trabaja especialmente en tres áreas: 1) capacitación e incorporación de las mujeres a puestos de responsabilidad; 2) integración del enfoque de género en el fortalecimiento institucional, mejorando los marcos jurídicos de nuestros países socios para fortalecer el sector y la gobernanza del agua teniendo en cuenta la perspectiva de género y 3) incorporación del enfoque de género en los programas de forma transversal y desde el principio de los mismos.
ODS 6: Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todas las personas
El trabajo del Fondo impacta en el ODS 6 de forma directa, abordando todas sus metas en conjunto: acceso universal a agua y saneamiento, mejora de la calidad, implementación de la gestión integrada de los recursos hídricos, protección de los ecosistemas, etc. Además, se trabaja muy específicamente en las dos metas transversales del ODS 6:
6.a: Creación de capacidades de gestión: A través de los programas del Fondo, se pretende crear capacidades que propicien la maduración progresiva del sector de agua y saneamiento en la región de América Latina y Caribe, promoviendo la clarificación y asignación de competencias y responsabilidades en los distintos ámbitos territoriales, el desarrollo de marcos normativos institucionales y organizativos y la coordinación interinstitucional. Esta línea de actuación se materializa en todos los programas del FCAS mediante componentes de fortalecimiento institucional y desarrollo comunitario, creando capacidades para la gestión de grandes programas mediante un acompañamiento constante y cercano, promoviendo el uso de los procedimientos nacionales de contratación y creando capacidades técnicas para la gestión de los servicios. Para la creación de capacidades en los operadores de agua y saneamiento, se están promoviendo hermanamientos y transferencia de conocimientos entre prestadores españoles y latinoamericanos-. Asimismo, se apoya el Programa de Formación de la CODIA –impulsado desde hace más de 20 años por AECID- y las actividades de creación de capacidades promovidas por RALCEA, la Red Latinoamericana de Centros de Conocimiento de Gestión de Recursos Hídricos.
6.b Apoyar y fortalecer la participación de las comunidades locales en la mejora de la gestión del agua y el saneamiento. Desde el Fondo, se fortalece la participación de las comunidades locales en el diseño e implementación de los proyectos, de cara a asegurar la sostenibilidad de los servicios, y se promueve la implicación de las comunidades en la propia gestión de los servicios, en ocasiones apoyando la creación de juntas de agua y de asociaciones de juntas. También se llevan a cabo numerosas acciones de capacitación y sensibilización de las comunidades en distintas materias relacionadas con el agua y saneamiento.
ODS 7: Energía asequible y no contaminante.
La meta 7.a se propone «aumentar la cooperación internacional para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología relativas a la energía limpia, incluidas las fuentes renovables, la eficiencia energética y las tecnologías avanzadas y menos contaminantes de combustibles fósiles, y promover la inversión en infraestructura energética y tecnologías limpias». En este sentido, cabe destacar algunas iniciativas específicas del Fondo del Agua, como la llevada a cabo en Guatemala para promover la generación de energía eléctrica a través de microturbinas. La energía generada se utiliza para los sistemas de bombeo y eléctricos haciendo que los costes de operación y mantenimiento de los sistemas sean menores, incidiendo sobre una cuestión clave para la sostenibilidad de los servicios. Se han realizado estudios además en Colombia y Nicaragua con vistas a incluirlo en otros sistemas que están siendo financiados por el Fondo. Por otra parte, en Honduras se ha promovido el uso de energía solar para obtener el agua del subsuelo mediante bombeo, reduciendo los costes de operación de los sistemas:
Soluciones innovadoras y sostenibles para la obtención de agua en Honduras
Entre los años 2011 y 2016, con el objetivo de dotar de agua potable a siete de las comunidades más vulnerables del país, se aplicó tecnología de energía solar para obtener el agua del subsuelo mediante bombeo. Así, se benefició a 4486 habitantes en condiciones de pobreza del Corredor Seco, una de las zonas con mayor incidencia de sequías y con los niveles más altos de radiación solar en Honduras.
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ODS 10: Reducción de desigualdades
La brecha en el acceso al agua y al saneamiento sigue siendo todavía muy grande entre las áreas urbanas y las zonas rurales o dispersas, y las diferencias se amplían cuando hablamos de poblaciones indígenas o afrodescendientes.
Por ello, a lo largo de sus 13 años de existencia, los proyectos del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento se han dirigido a las poblaciones más vulnerables, en concreto aquellas que viven en zonas rurales, áreas periurbanas de las ciudades y comunidades indígenas. Esto no significa solamente que sean los beneficiarios de los proyectos, sino que éstos se han adecuado en función de las necesidades, costumbres y especificidades propias de las comunidades, con el objetivo de que los programas sean sostenibles en el tiempo. Esto ha supuesto, por ejemplo, la traducción de materiales a idiomas locales, y la adecuación de algunas soluciones, ya fueran de infraestructura o de modos de ejecución. Así, por ejemplo, se ha puesto en marcha la construcción de baños secos en Bolivia (soluciones de saneamiento que tienen en cuenta las especificidades de la población y la disponibilidad de agua para adaptarse a ellas) o los proyectos a través de núcleos ejecutores en Perú (modalidad por la cual es la comunidad, no los gobiernos municipales u otra autoridad, la que se encarga de las contrataciones de los profesionales necesarios, y el resto de personal no especializado es contratado en la propia comunidad que se involucra en la construcción de los sistemas de agua y saneamiento).
ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles
El ODS 11 tiene como meta: “Lograr que las ciudades sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles”. En un mundo en rápido proceso de urbanización, en el que los asentamientos informales crecen cada día y los desastres ambientales causan numerosos daños, es imprescindible contar con una red de saneamiento y agua potable adecuadas. Por ello, los programas del Fondo del Agua se centran en las zonas periurbanas (además de las zonas rurales), con el objetivo de que éstas tengan acceso a depuración de aguas, sistemas de alcantarillado y agua potable para evitar el aumento de la precariedad y la desigualdad en cuanto a la dotación de servicios. En este sentido, se trabaja principalmente en ciudades intermedias, mejorando las condiciones de vida de las personas y ayudando así a que éstas permanezcan en ellas, previniendo el éxodo a las grandes urbes y la concentración excesiva de población.
ODS 13: Acción por el Clima
Los programas del Fondo dan gran relevancia a los asuntos ambientales, impulsando la adaptación al cambio climático a través de soluciones adecuadas a las necesidades y capacidades de la población, desde un enfoque de gestión integrada de recursos hídricos.
Así, se ha trabajado en la protección de cuencas y en proyectos de diagnóstico y estudio de zonas medioambientalmente afectadas. Muchos de estos proyectos se han puesto en marcha a través de la Cooperación Delegada por la Unión Europea, dentro del programa para Promover la adaptación al cambio climático y la gestión integral de los recursos hídricos en el sector de agua y saneamiento en América Latina en el marco del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento (FCAS). Adicionalmente, todo el ámbito de saneamiento y depuración de aguas residuales tiene un efecto directo e inmediato en el medioambiente.
ODS 16: Paz, justicia e instituciones solidarias.
El agua es un bien escaso que puede provocar conflictos por su uso y gestión, especialmente cuando se trata de cuencas transfronterizas, lo que puede llevar a guerras por el agua. Por ello, una buena gestión y gobernanza del agua es clave, algo en lo que se incide desde los proyectos del Fondo. En este sentido, el Fondo ha trabajado con una visión regional, a través de una Cooperación Técnica denominada “Recursos Hídricos Transfronterizos: un marco de seguridad hídrica para las cuencas transfronterizas en América Latina y el Caribe”, puesta en marcha por el BID y con apoyo del LAIF Regional. El objetivo es apoyar el modelo de gestión de aguas transfronterizas a través de herramientas que permitan realizar diagnósticos y establecer escenarios de gestión compartida minimizando los conflictos y planeando la gestión de manera resiliente y sostenible. Un enfoque que incide directamente en la construcción de paz en la región. Por otro lado, el Fondo trabajado específicamente en Colombia, contribuyendo a la construcción de paz.
ODS 17: Alianzas para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible
En el marco del ODS 17, que tiene como objetivo impulsar una alianza mundial por el desarrollo, el Fondo trabaja de dos formas. Por un lado, tejiendo una red de acompañamiento y trabajo conjunto con los países socios que, a lo largo de los años ha permitido crear una interlocución estrecha y de confianza al más alto nivel. Por otro, trabajando de la mano con numerosos actores y redes clave, tanto nacionales como internacionales, dentro del sector en América Latina y el Caribe. En este sentido, el Fondo cuenta con el Banco Interamericano de Desarrollo como socio estratégico en la región. Otro de los puntos fuertes de la Cooperación Española y de los programas del Fondo es que aprovechan la experiencia y excelencia de las instituciones españolas líderes en el sector del agua para cooperar a través de estudios, visitas de campo, informes técnicos y capacitaciones en América Latina, en el marco del ODS 17 de impulsar una alianza mundial por el desarrollo.